Puedo hablar de sus inseguridades porque las he visto dentro de él, muy profundamente. Parece un chico bastante seguro, pero sé que es más frágil que un vaso de vidrio al caer. Puede desmoronarse y volver a unir sus piezas rotas en poco tiempo. Es capaz de sentir y dejar de sentir afecto por otras personas cuando él lo decide. Es increíble que piense que de alguna forma tiene el control de todo; sin embargo, cuando se da cuenta de que no es así, le molesta. Sentimentalmente inestable, no encuentra su lugar en ningún lado; ya que se aburre muy fácil de las mismas personas. Intenta parecer un galán, pero tiene un autoestima que deprime. Deja que su valor se lo hagan ver los demás, no lo hace por sí mismo. Se involucra con facilidad en cualquier ambiente porque tiende a depender de otros para sentirse bien. No es capaz de estar solo. Tiene que estar recibiendo cariño ajeno porque él se tiene muy poco. Suele asustarse cuando ve que algo se le va de las manos. De ahí llegué a la conclusión de que le gustan los retos, las personas difíciles, y los amores sin compromiso. Es aquí cuando entro en su vida; una chica que no hace más que existir para él. Que a pesar de cualquier daño que él pueda provocarle, seguirá allí sin pedirle su amor a cambio, de hecho nada a cambio. Una chica que piensa que de alguna forma, viven para quererse, y un chico que cree que todo es pasajero, que sólo vive el momento. Sí, de alguna extraña manera están unidos, quizás no física, pero sí espiritualmente. Un tipo de amor que jamás acaba, amor de amantes.
martes, 22 de noviembre de 2016
sábado, 12 de noviembre de 2016
Más que eterno.
Un largo tiempo ha pasado en que lo somos todo y aún no encuentro la manera de nombrarnos, aún no sé cómo presentarte, como presumirte. Hemos sido un todo al mismo momento en que un nada.
Hacen ya días y días en que te pienso como ser infitito porque eres lo único a lo que no le veo un fin, ni un inicio.
Rápido como lluvia que cae me acostumbré a tus lunares y esas cicatrices extrañas en tu cuerpo, a tus formas de besar y de extrañar, a la singular manera en que escribes y me miras.
Podría llamarte "siempre", porque eso eres para mí. Un siempre que abarca más que la vida misma. Podría contarte aún más cosas sobre ti de las que aún no te percatas.
Si existiera otra acción más intensa que amar, lo haría contigo.
Defíneme porque necesito saber que no soy más que un chica para ti. Hazlo, sé que tienes que pensarme de alguna forma. Especial, digamos. Sólo necesito saberlo, es complicado entenderte, y a la vez amarte.